martes, agosto 17, 2010

Asco




¿Por qué existe tanta maldad en este mundo?
¿Cuándo nos fuimos haciendo menos humanos?
¿Cómo poder quedar inmóvil ante tanta porquería?
Cómo no sentir el nudo en la garganta y romper en llanto
acurrucada por la soledad, la única compañera confiable.

He visto lo que el ser humano hace,
la degradación, la bajeza, la ambición.
He escuchado las plegarias de los que no tienen nada
mas que la esperanza y el recurso de la oración
dirigida a un dios que hace mucho dejó de existir.

Estoy triste y conmovida,
¿cómo puedo cambiarte, mundo?
Dime cómo.
Sólo quisiera poder llorar un año completo
tener la fortaleza para ir limpiando la mirada de todos
con mis propias lágrimas.
Quisiera reír hasta no poder hacerlo nunca más,
contagiar mis risas y alegrías a todos los que perdieron la esperanza.
Quisiera poder amarte, que fueras esa presencia en mi cama,
que fueras la voz en mi oído, quisiera poder quemar mi cuerpo
y ser las cenizas de las que algún día renacerá
un árbol que sea mecido por el aire,
que alimente a todas esas bocas suplicantes.

Pero no hay más que lluvia
y un ruidoso reloj en mi cuarto que me recuerda
que todo es pasajero
y que el dolor del mundo
seguirá provocando
estas terribles náuseas nocturnas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente blog, sigue escribiendo :)

Respecto al asco que da la bajeza humana, da ira, rabia para luego llorar porque la gente tiende a la miseria no a la material sino a la miseria moral. Algunos usan de antifaz símbolos religiosos para esconder su maldita forma de ser. Otros por dinero, status, o por herir antes que alguien los hiera.
En estos tiempos todo es tan indigesto.